Una ducha no nos hace mal.

Usualmente, las personas se bañan para higienizarse (uy, me re falla). ¿A qué viene esto? A que yo, además de utilizarlo para fines higiénicos, lo utilizo para meditar. Si, meditar. ¿Sobre qué? Ideas, ideas y más ideas. ¿Por qué? Más que nada para aclarar delirios internos, pero que no vienen al caso. Entonces, resulta que estoy debajo del agua (fría, aclaro) y de la nada noto que mi cabeza se empieza a quemar. Si, a quemar. Empezó a salir agua caliente, no sé cómo, y lo primero que hice fue retroceder (casi me caigo, pero no se preocupen que estoy bien). Esto me hizo reflexionar sobre lo sucedido hace instantes: estoy tranquilo con el agua fría, y de repente cambia a la caliente. El pensamiento resultante de esto fue fugaz, y lo capté muy bien: había relacionado al agua con una persona. Fue todo muy metafórico, la verdad, pero me sirvió para reflexionar, como dije antes. Luego, puse mi brazo en el agua caliente (ahora mucho más que antes), el vapor recorría mi cara, los ojos me ardían, y sentía el brazo entumecido. Lo saco, me adentro y apago el agua. Abro la canilla nuevamente (fría) y me congelo. La cambio a caliente, me quemo. Las combino, y me quedo allí, parado por unos minutos. Si, puede ser que esté loco.
En síntesis, esto fue lo que asocié:

* Uno tiene una relación con alguien (mi estado de calma ante el agua fría), y esta persona de repente te apuñala por la espalda, es falsa con vos, te traiciona, etc, etc, etc. (cambio repentino al agua caliente).

* Ante este imprevisto, uno puede hacer dos cosas: plantarse y aguantar, o correrse y dejarse golpear.

* Si te plantás y te la aguantás te quemás, pero podés apagar el agua. Es decir, te va a doler, pero enfrentás la situación y, a futuro, superás el imprevisto. Si te corrés y te dejas golpear sos un cobarde que se escapa y deja que el agua caliente avance, haciéndose más poderosa. Es decir, dejás que te pisotee a su antojo, logrando así alimentarla y hacerla más fuerte.



Bueno, así podría definirse en este caso, pero uno puede asociarlo como guste. No recuerdo la sensación que tenía cuando me sucedió esto, pero si recuerdo haber tenido un momento de inspiración brutal. Tenía ganas de salir del baño y ponerme a escribir, pero me quedé allí y lo perdí, por lo que siento que no fue tan así como sucedió todo. Si gente, yo tengo momentos de inspiración muy pequeños, es decir, si se produce eso y yo no tengo a mano algo para escribirlo, lo pierdo. No creo que esta entrada posea sentimiento, pero bueno, veré sus comentarios. Los saluda atte:

Peacemaker.

(Quedó como una nota del cuaderno de comunicaciones al final, jajaja).